Como expertos en la limpieza y vaciado de fosas sépticas en Valencia, hoy nos gustaría aprovechar este post para hablarte de las diferencias básicas que existen entre las fosas sépticas y los pozos ciegos, también denominados pozos negros. Continúa leyendo este artículo si te interesa conocerlas.

Obviamente una fosa y un pozo tienen mucho en común. Tanto la fosa séptica como el pozo ciego están orientados a albergar los desechos de aquellas viviendas que no se encuentran conectadas con los sistemas públicos de alcantarillado y eliminación de los residuos generados naturalmente.

Ahora bien, mientras que una fosa séptica está concebida no solo para albergar sino también para tratar los residuos que llegan a ella para poder enviarlos de nuevo al suministro de aguas subterráneas, el pozo ciego no está conectado con ningún sistema de drenaje por lo que almacena las aguas residuales sin posibilidad de eliminarlas ni devolverlas al sistema de suministro.

Por este motivo, un pozo ciego debe ser vaciado en el momento en el que alcanza su máxima capacidad mientras que una fosa séptica no va a llenarse nunca al tratarse de un sistema drenado que permite reutilizar las aguas residuales. Aunque esto no quiere decir que una fosa no requiera nunca ser vaciada, al contrario: como expertos en el vaciado de fosas sépticas en Valencia recomendamos hacerlo cada cierto tiempo para limpiarla y eliminar la acumulación de residuos sólidos que se van acumulando en ella.

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